Declara inconstitucional la interrupción del embarazo por malformación del feto.
Las mujeres en Polonia son desde este jueves menos dueñas de su cuerpo. El Tribunal ha declarado inconstitucional la interrupción del embarazo por malformación del feto, reduciendo los supuestos legales para el aborto a la violación, el incesto y riesgo grave para la salud de la madre.
La sentencia ha desatado un aluvión de reacciones en contra, condenando a las polacas al aborto clandestino o poner fin a la gestación fuera del país.
Los colectivos para los derechos de la mujer y una salud reproductiva sostienen sin embargo que eso es sólo la punta del iceberg. Se calcula que entre 80.000 y 120.000 polacas viajan cada año al extranjero para interrumpir la gestación.
Es inhumano obligar a una mujer a completar un embarazo cuando hay malformación del feto y condena a la mujer a una tortura de por vida.
También desde la oposición ha habido críticas al fallo. "Ya no habrá abortos en Polonia, pero sí madres con hijos con anencefalia, espina bífida, sin corazón,… y niños que morirán en agonía".
El ex primer ministro y ex presidente del Consejo Europeo Donald Tusk, habló de "villanía política" y a través de Twitter señaló que "lanzar el tema del aborto y fallar en un pseudo-tribunal en medio de una pandemia furiosa es más que cinismo".