Los cambios que se sufre durante la menopausia pueden hacer que no tengas ganas de tener sexo. Los sofocos, la sudoración, el insomnio…Son algunos de los síntomas asociados a esta fase y pueden repercutir en que pierdan las ganas de tener cualquier tipo de relación sexual sola o en pareja.
Cuando disminuyen los estrógenos
Cuando el estrógeno disminuye, pueden aparecer síntomas, como estado de ánimo cambiante, fatiga, insomnio, sudor, sofocos, dolor o molestias musculares y articulares, sequedad vaginal, etc.
Para algunas mujeres, esta disminución de las hormonas sexuales puede ocasionar sequedad vaginal, lo que puede llevar a que el tejido vaginal se vuelva menos elástico y delgado, pudiendo causar dolor durante el sexo. A menudo, la sequedad vaginal va acompañada de una disminución de la libido por miedo al dolor durante las relaciones sexuales.
Tener un buen sexo en la menopausia
* Lubricantes e hidratantes: Una de las mejores maneras de disminuir la sequedad durante el sexo es aumentar la humedad con un lubricante.
* Terapia hormonal sustitutiva: puede ayudar a combatir la deficiencia de estrógeno. Los medicamentos que intervienen contienen análogos de las hormonas sexuales femeninas estrógeno y progesterona, y pueden administrarse por vía oral o a través de la piel y la vagina.
Es importante recordar que la menopausia es solo otra fase más de la vida, y la buena noticia es que muchos de sus síntomas pueden ser controlados.
Recuerda: puedes contagiarte de una enfermedad de transmisión sexual a cualquier edad y l menopausia no es un freno para ellas. Usa el condón incluso después de su 50º cumpleaños. Durante el primer año después del último periodo, es importante el uso de anticonceptivos para evitar embarazos no planificados, ya que durante este tiempo puede producirse una ovulación espontánea.